Tropezar y caer forma parte del camino y levantarse es necesario, es el proceso natural para seguir adelante.

Cuando siembres la semilla, ¡hazlo con confianza! Sé perseverante en sus cuidados, solo será cuestión de tiempo que recojas sus frutos.

Cuando tropiezas y caes, duele; sin embargo, más doloroso es no tener la posibilidad de levantarte.

Recuerda: ¡el éxito siempre está del lado del que persevera! La satisfacción no consiste en no haber caído nunca, sino en levantarnos cada vez que caemos.

Observa como las grandes obras no están hechas con la fuerza, sino con la perseverancia y el trabajo bien hecho.

Con mi mejor energía,

Oskar